jueves, 31 de octubre de 2013

EL CAMINO A SER FELIZ

El camino a la felicidad es tan fácil de encontrarlo porque es en línea recta, más en su trayecto nos encontramos con falsedades, vicios, injusticias, pobreza, prepotencia, desigualdad y muchas cosas más. Pero todo tiene un sentido, porque conforme avanzamos se van librando obstáculos, y a cada paso, más clara se ira haciendo la luz que te guiará a su origen. Cuando hayas vencido todas las adversidades antes mencionadas, lo mejor es que cada una de ellas trae consigo la forma de brincarlas sin detenerte en alguna de ellas. 

Falsedad: sólo con la verdad absoluta será vencida, viviendo en un mundo real creyendo sólo cuando estés convencido de los actos a los que te enfrentas entendiendo que no hay lugar para la suposición.
Vicios: dime con quién andas y te diré quién eres, así lo dice un viejo refrán. Y es porque todos los que conviven con alcohólicos, aunque lo nieguen y digan que son fuertes tarde o temprano terminan siéndolo también, y lo mismo sucede con los drogadictos, criminales, fanáticos etc. Con esto debemos de entender que vicio es cuando existe abuso físico o mental que perjudique a uno mismo o a terceras personas, por lo mismo debemos de estar conscientes de la compañía que pretendemos.

Injusticias: sólo da a tu prójimo lo que tú quisieras recibir. Cuando debas de tomar una decisión procura pensar antes, y de ser necesario imagina lo que puede llegar a suceder. Haz las cosas bien, con conciencia y jamás dudes de tu integridad.

Pobreza: debemos de procurar la capacitación de todo individuo y aprender a valorar el esfuerzo y empeño, ya que sólo siendo profesionales podremos aspirar al mejoramiento diario en todo lo que realicemos, y por consecuencia, el progreso y un mejor futuro será el resultado.

Prepotencia: es el mismo hombre quien debe aumentar su autoestima, al entender que si se humilla o agacha la cabeza ante alguien de mayor rango o posición social, sólo está generando para él mismo barreras que serán muy difíciles de borrar en el futuro.

Desigualdad: para evitarla es necesario que comprendamos que no existe. Nadie es más que nadie; todos en este mundo nacemos de la misma forma, por eso debemos de valorarnos y darnos todas las oportunidades necesarias para que aprendamos tanto de los triunfadores, como de los que cedieron en el camino. Y ahora son unos derrotados. Hay que aprender de sus intentos de lograr una mejor posición y tomar sólo lo mejor de cada uno de ellos. 

Cuando tengamos un buen equilibrio y hallamos rebasado estos obstáculos podremos decir con orgullo: ¡Ya estoy en el verdadero camino a la felicidad!

martes, 29 de octubre de 2013

Una historia de Amor

"Esta es la historia de un hermoso amor...
El... un hombre solo, aventurero y lleno de ganas... de simplemente vivir...
Ella... una mujer preciosa, procesando un cambio en su vida... sola, y sin haberse dado cuenta de las inmensas ganas que tenía de simplemente ser feliz...
Ellos, se encontraron un día, el sol iluminaba aquel atardecer, fue un verano... una tarde como cualquiera...
El la atrajo con su encanto, y ella la cautivo con su simpatía...
Así comenzó la más hermosa historia de amor, pasaron los días, se buscaban...
El cada noche con una desesperación que no lograba comprender...
Ella, lo esperaba con ansias, sabía que llegaría a su encuentro, como cada día, como cada noche, empezaron a nacer frases hermosas... empezó fluir el amor, puro, sincero, y por sobre todo verdadero, por que aquí no habían rostros, no habían cuerpos, solo habían palabras y sentimientos, y eso bastaba para sentir que sus vidas tenían un mismo destino.
Ellos empezaron a enamorarse, de la forma más tierna y dulce, como aquella mujer...
Ella lo fue enamorando poco a poco, con su simpleza, con su ternura, con con su cariño,
El siguió el camino de la conquista... la protegía, la acompañaba, la hacía sentir aquellas lindas cosas que ella desconocía...
Ella empezó a amarlo... sintió que el era el hombre de su vida, que lo quería a su lado, para continuar su vida...
El, sentía que ella, su linda Pamela, era la mujer con quien deseaba compartir su mundo, que entre líos y dientes, ella sería la mejor compañía...
Ellos se dieron cuenta que se necesitaban, eran el uno para el otro, se estaban enamorando, y poco a poco lo mas tierno...se estaban deseando...así llegó el amor a sus vidas...
Hoy aun están juntos, se están amando intensamente, se necesitan, se adoran , se profesan un amor inmenso, los sueños acompañan sus vidas, un futuro les aguarda, una casa...unos niños... que esperan por ellos, para que fundidos en aquella pasión sin limites...los engendren con el mas puro sentimiento de amor…
Ellos... PAMELA Y CRISTOBAL viven sumidos en la alegría y la felicidad, bendecidos por la vida, por haberle ganado a la adversidad.
En esta historia... ganó EL AMOR...”

martes, 22 de octubre de 2013

Otra Gran Historia

Érase una vez, en algún lugar lejano, remoto, perdido en el tiempo y en el espacio, dos diamantes gemelos, idénticos, que viajaban en la bolsa de un gran señor que, con especial cuidado, los transportaba por un camino. Sucedió, que sin esperarlo, este buen señor de pronto fue atacado por una banda de ladrones que persiguieron su carruaje intentando quedarse con sus pertenencias.

El señor, al ver que no podría escapar, y sabiendo que sus dos diamantes perfectos eran todo su tesoro, en un recodo del camino, mientras huía a toda carrera, los sacó de su bolsa y dándoles un beso de despedida los arrojó a un costado del camino, cerca de un árbol el cual usaría como referencia para poder volver a buscarlos.

El tema es que los dos diamantes cayeron al suelo, a la corta distancia de dos metros uno del otro, y allí quedaron, a la espera de ser descubiertos por alguien o recuperados por su señor, ya que no habían nacido sino para ser piedras de corona real.

El tiempo pasó, pasaron las horas, los días, las semanas y por último los meses y el señor jamás volvió por ellos. Los diamantes que ya estaban preocupados, comenzaron a hablar... No nos quiso, dijo uno de ellos, no nos quiso porque no somos diamantes, yo siempre lo supe, somos rocas sin valor y por eso nos arrojó de su carruaje, claro...

¿Quién querría pedazos de piedra como nosotros?... El otro diamante que lo escuchaba, a su vez le respondía... No, sabes que no es así, nos arrojó para protegernos, porque éramos su tesoro más preciado y si no volvió será porque algo le habrá pasado, porque jamás nos habría abandonado...

El tiempo se consumió en charlas similares... Y siguió pasando, y los diamantes siempre mantenían la misma postura, uno de ellos veía el vaso medio vacío y el otro el vaso medio lleno. Cuando los meses se convirtieron en años, el diamante positivo, por llamarlo así, el que sabía su valor, propuso...

Hagamos algo... Brillemos, con más fuerza de la habitual, brillemos hasta encandilar con nuestro brillo, así, quien pase por el camino nos encontrará y podremos por fin convertirnos en lo que soñamos, en piedras preciosas de corona real... No, le dijo el otro, tú no entended... Somos rocas, piedras, convéncete “piedras”
¿Entendéis? y por más que lo intentáramos jamás podríamos brillar, nadie nos querría, nadie nos valoraría, no vale la pena hacer nada, somos parte de este paisaje agreste y aquí nos debemos quedar...

Frente a este desencuentro de voluntades, el diamante positivo, sin dejarse contagiar por lo que escuchaba...
Comenzó a brillar, al principio tímidamente y finalmente con un brillo tan poderoso que competía con la luna, ya que atesoraba los rayos del sol durante el día y en la noche los despedía, asumiendo así su condición, reconociendo con orgullo lo que sabía que en realidad era, valorándose, esto, por supuesto, contra su entorno y la situación que al ser tan desfavorables, podrían confundirlo y hacerle ver lo contrario...

Así, el tiempo siguió su curso, y el diamante negativo se llenó de barro por las tormentas y quieto y sin brillo desapareció en la tierra, enterrado por los vientos, convirtiéndose en lo que decía ser, solo una roca más, una piedra sin valor a la que nadie iba a descubrir.

Mientras tanto, el diamante positivo seguía brillando, aprovechando las lluvias para sacarse de encima el lodo y los vientos para secarse y pulirse aún más... Y así, un día, como todo llega, un par de ojos que pasaban por el lugar vieron un extraño, pero perfecto brillo desde lejos y al dirigirse hacia donde provenía, esos ojos pudieron comprobar que se trataba de un hermoso y perfecto diamante.
¡Oigan!... gritó, he encontrado la más perfecta joya, este ha sido un regalo de ¡los dioses! la llevaremos para que la ¡instalen en mi corona! Sí, aunque no sé pueda creer, esos ojos pertenecían al rey del lugar, un señor que por fin le dio al diamante el lugar que merecía, cumpliendo su sueño de convertirse en hermosa piedra preciosa de corona real... Y aquí terminó la historia... Ah, ¿quieres saber que pasó con el otro diamante...?

Cuando sintió que su hermano gemelo era rescatado, quiso brillar también, pero tanto tiempo había estado convencido de no Ser un diamante, tanto se había dejado llevar por la mala situación, que se olvidó de cómo hacerlo y allí quedó...
Inmerso en la cárcel del olvido, una cárcel que fabricó día tras día y en la cual el mismo se encerró. Y esta cárcel fue ni más ni menos el ignorar quien era realmente, no saber valorarse, porque un diamante no deja de ser diamante porque alguien lo arroje, un diamante no deja de ser precioso, de tener valor, por estar perdido en el desierto, por estar solo.

Un diamante siempre es un diamante. Por eso, esta historia es para mí, porque cuando veo que nadie parece valorarme, cuando veo que nadie parece ver en mí lo que soy, lo que puedo ser, lo que puedo hacer, lo que puedo dar... Nunca olvido mi condición natural, soy un diamante y lo sé y lo que importa es eso y jamás dejo de brillar...

Vos también eres un diamante y no importa quien lo crea, si te sirve yo lo creo, pero lo importante es que lo creas y lo asumas en tu interior. Eres un perfecto diamante, pero igual que yo, no te dejes convencer de lo contrario, por nadie ni por nada, seguí adelante récord quien eres y nunca dejes de brillar.

Jamás te inviertas en piedra, brilla, porque tarde o temprano pasará un rey, o una reina, alguien entendido, que quedará encandilado con tu brillo, que te valorará y que, en definitiva, sabrá apreciarte como el tesoro que realmente eres...

sábado, 19 de octubre de 2013

PORQUE LO HACES ?

POR DINERO O POR AMOR ?

En la Universidad de Harvard se hizo un experimento apasionante. Se les preguntó a 1,500 estudiantes en qué se enfocarían al finalizar su carrera, si en el dinero, o en hacer lo que les gustaba.

1,255 dijeron que en el dinero. 245, en hacer lo que les apasionaba. En este experimento se dejaron pasar 10 años. Si 10 largos años. El objetivo, era saber cuantas de las personas que se enfocaron en el dinero llegaron a ser millonarias, y cuantas de las que se enfocaron en hacer lo que les gustaba, lo fueron.
¿Resultados? Reveladores.

De los 245 que hicieron lo que les gustaba…
100 eran millonarios al cabo de 10 años. Si. ¡Apasionante! ¿No te parece?
¿Te gustaría saber cuantos de los 1,255 que dijeron que se enfocarían en el dinero, fueron millonarios?
Uno. Si, uno solo. Me da un poco de risa dar esta cifra.

Se que haz escuchado que hay que enfocarte en lo que más te apasiona y no en el dinero. Pero también se, que las presiones de tus padres, amigos, el qué dirán, te harán dudar y a muchos inclinarán a orientarse en el dinero.

Este es una investigación científica, que te demuestra que el único camino seguro para tener dinero…
Es hacer lo que más te apasiona.

Un motivo más para seguir tus instintos a la hora de elegir una profesión y dejar de lado opiniones de otros, en especial cuando viene el clásico “Es que esa carrera no da dinero, mejor dedícate a otra cosa que sí te deje”.

El mundo está lleno de personas que no están haciendo lo mejor que pueden hacer, porque no lo hicieron por amor. Lo hicieron por dinero. Ayúdate a ti mismo y ayuda al mundo, haciendo solo lo que amas.

martes, 15 de octubre de 2013

LA HISTORIA DEL JOVEN Y EL PARA CAIDAS

Un joven turista se encontraba en las playas de Cancún y era la primera vez que subiría en un paracaídas jalado por una lancha. Si conoces la playa, sabes que los lancheros prestan ese servicio, que consiste en que un paracaídas es amarrado por una cuerda a una lancha.

Entonces, la lancha inicia su recorrido mar adentro, con el turista sujeto al paracaídas con un arnés. Este corre con el paracaídas en la playa por unos instantes, hasta el momento en que el turista despega los pies del suelo, el paracaídas se eleva hasta el cielo y la persona junto con el.

Imagínate, el joven no sabía nadar y tenía las siguientes preguntas en su cabeza:
¿Qué pasará si la lancha me arrastra mar adentro, antes de que me eleve el paracaídas?
¿Qué tal si una vez en el cielo, me caigo de semejante altura?
A pesar del miedo, decidió actuar y confiar en la incertidumbre. Sabía que era una experiencia nueva y era natural tener miedo. Pero también sabía que la vida es eso, experiencias nuevas y que tenía que estar abierto ante la vida.

Se puso el arnés. Escuchó con nerviosismo las últimas indicaciones del instructor. “Ruuuuuum” se escuchó el sonido del motor de la lancha que iniciaba su recorrido al mar. El joven comenzó a caminar al principio y después a correr a medida que la velocidad aumentaba.

Y llegó el momento en que tuvo que pegar un salto para evitar caer al mar “¡Guuuuuaaaaaauuuuuu!” no lo podía creer, el paracaídas se elevó y en cuestión de segundos, estaba a muchos metros encima, viendo el mar y los hoteles de la ciudad, como si fueran casas de juguete. Y sintió paz.
“Qué emocionante, nunca me hubiera imaginado que sería tan fácil y divertido” y disfrutó de la hermosa vista desde el cielo.

¿Qué podemos aprender de este joven? Es natural tener miedo ante lo desconocido. La imaginación crea mil y un fantasmas pero son eso. Fantasmas. No existen en realidad y son auto-creados.

Mi pregunta es: ¿Cuántos de nosotros evitamos tener experiencias nuevas por temor a lo desconocido?
Aún más fuerte: ¿Cuántos miedos imaginarios has acumulado durante tu vida, que te han evitado experimentar cosas nuevas y ser feliz?

“Muchos sinsabores he tenido en la vida, la mayoría de los cuales nunca me han ocurrido”. Exacto. Si analizas tu vida a la luz del pasado, descubrirás que lo que más temes nunca pasó y cuando sucedió, resultó ser una experiencia única y placentera.

Te invito a que busques dentro de ti, aquello que has evitado hacer por mucho tiempo, por culpa de esos fantasmas imaginarios y lo hagas.

¿Y quién sabe? Quizás disfrutes de una hermosa vista del cielo, como el joven de la playa.

lunes, 14 de octubre de 2013

Tu piloteas tu Vida

“Cuando conduzco el coche, me molesta que quien está junto a mi, me diga que camino tomar, que me detenga o ¡cuidado! Yo soy el conductor. Yo se porque hago lo que hago. Y el conductor es el único que lo sabe. Nunca hago caso de quien quiere decirme como manejar, porque por eso pasan accidentes”.
Escuché que le respondía un hombre a su amiga, cuando esta le platicó que su hija conducía un coche, y le dijo que acelerara para evitar un trailer. Su hija le hizo caso, pero no alcanzó a pasarlo. El trailer se llevó el coche. Afortunadamente viven para contarlo.

Como un rayo, comparé las similitudes que tiene este ejemplo con nuestra vida.
Nuestro coche se llama “vida” y el Ser Supremo ha sido lo suficientemente generoso, como para darnos a cada quien un “coche” propio.

Todos somos los conductores de nuestra propia vida. Desafortunada-mente, muchos no asumen esa responsabilidad.

Son conductores miedosos, que les gusta preguntar a cuanto tripulante tienen, que deben hacer.
Y como resultado, tienen accidentes o no están satisfechos con su vida. ¿Por qué siguen escuchando los consejos de otros, cuando no están satisfecho con los resultados?
Simple. Es más fácil culpar a otros de sus fracasos, que ser responsables de sus decisiones.
Es el caso de la chica que le pregunta a la mamá ¿Qué debo estudiar?
O el caso del chico que pregunta ¿Cuál carrera da más dinero?
Porque el precio de seguir los impulsos de tu corazón, de tomar tus propias decisiones, es la posibilidad de fracasar.

Nadie puede esperar tener éxito en lo que le gusta con tan solo unos intentos. La historia está llena de hombres que estuvieron peleando por sus ideas, y que después de fracasos temporales, obtuvieron el éxito.
Aplicaron la persistencia en sus sueños.
La sensación de libertad, de asumir el control del volante de tu vida, te dará una seguridad y energía interior que no tiene precio.

Para un militar, su orgullo son las heridas de guerra. Y para el hombre de negocios, platicar de sus fracasos, antes de alcanzar la cima.

Aunque las derrotas temporales te causen dolor… cuando sean cosa del pasado, te divertirá recordarlas. Le dará más valor a tu éxito.

Detén a esa persona mata pasiones, y no la escuches cuando quiera dirigir el coche de tu vida, a una velocidad diferente a la que tú lo haces.
El no conoce porqué haces lo que haces. No conoce tu vida, como tú la conoces.
El no comprende tus sueños y motivos.

Finalmente, él en sus consejos, proyecta lo que él es. Lo que el hace. Lo que haría en tu lugar. Y si es un mediocre, y le haces caso… vas a acabar siendo un mediocre también.
Observa que las personas que han tenido éxito, primero se escuchan a sí mismas. Fueron tercas en escucharse primero a ellas mismas, antes que a los demás.

¿Que consejo te puedo dar? Hay dos frases que me encantan: “Caminante no hay camino, se hace camino al andar” de Machado, y “Try hard enough” de Malcolm Forbes, esto es: sigue intentando hasta que tengas éxito.

Recordando mi vida, veo que las actividades en que he tenido más éxito, son en las que he aplicado estas dos frases. Y añade otro ingrediente: la esperanza.

En lo que más he tenido éxito, siempre hubo un momento en el que tuve un fracaso tan doloroso, que se abrían ante mi dos caminos: seguir adelante a pesar de que parecía que no lo lograría, o resignarme.
Al tomar el camino de seguir adelante… ¡lo logré! Te confieso que ya no creía en mi. Pero tenía la esperanza de lograrlo. Y la esperanza, transformó en realidad mis sueños.

También, hubo momentos en los que elegí el camino de la resignación. Me excusé ante mi mismo con mil pretextos de porque había fracasado. Pero no dejo de pensar que pude haber elegido la otra vereda y que pude haber tenido éxito.

La esperanza debes mezclara con la persistencia también. Tu Breve Espacio, es fruto de la esperanza y persistencia combinadas.

La fe en un Ser Supremo también ha sido muy importante para mi. Me ha dado la paz y serenidad necesarias cuando parece que mi mundo se voltea de cabeza.

Te invito a que experimentes la emoción de conducir el coche de tu vida. Disfrútalo a tu ritmo, a tu manera ¡Y condúcelo hasta las estrellas!
¡Suerte!

martes, 8 de octubre de 2013

El Autoestima

Quizás lo más importante de tener un bajo concepto de ti misma, es la sensación interior de impotencia… de no capacidad para lograr lo que te propones.

Del miedo a los demás o creer que son superiores en forma alguna a ti.
Del creer que no eres lo suficientemente especial como para ser querida, valorada… amada.
De no creerte digna del amor y del aprecio.

Lo curioso, es que tienes lo mismo que los demás ¿Porqué te sientes menos entonces?
Mi primera observación, es que cuando tú eras pequeña, eras audaz, atrevida…curiosa. Aprendiste a patinar después de muchas caídas y moretones. Claro, llorabas, pero de ninguna forma pensabas acerca de ti que eras una tonta o algo así ¿verdad?
Simplemente te levantabas y seguías intentándolo… hasta que aprendiste a patinar. Nunca asociaste tu valor personal al que te cayeras y tropezaras. Simplemente seguías intentándolo por inercia, como algo instintivo y natural.

Eras feliz, no importando si eras pobre. Nunca pensabas en ti en términos de valía. Simplemente disfrutabas cada momento, jugabas, reías, llorabas, preguntabas…
Te perdías en la vida. Jamás te pasaba por la mente pensar en abstracciones acerca de tu valor.
El bombardeo para crearte una baja auto-valoración, surge por una necesidad temprana de tus padres de controlarte. Eres tan libre, segura de ti, inquieta, que creas molestias.

Entonces, tus padres intentan “domarte” desde que eres pequeña. “Si no te comportas, ya no te voy a querer”, “Si te portas bien, te compro algo”, y así, empiezas a dominarte y ahogar a tu verdadero ser.
Luego, la competencia entre padres, de que su hija es mejor, más alta o más inteligente que las otras… y te enfrentan contra tu primo, tu hermano… como si fueran gallitos de pelea, no?
Ahhhh, como me molestaba eso de mis padres cuando era pequeño. Pero así son todos, verdad?
Cuando vas a la escuela, convives con compañeritos que a su vez son bombardeados por sus padres con buenas dosis de críticas… y recuerda que los niños son fiel reflejo de lo que sus padres les dicen.
Los niños repiten fielmente lo que les dicen sus padres. Entonces, si un niño que recibe un mensaje en su casa “eres un tonto”, a la vez él te va a decir “eres una tonta”.

En verdad comienzas a pensar que lo eres.

Entonces, es cuando comienzas a crear mentalmente una baja imagen acerca de ti. Y descubres que si haces lo que tus padres y compañeritos te dicen… tendrás la etiqueta de niña buena, bien portada y decente…
Y comienzas a decir lo que los demás desean oir… actuar con miedo, no sabiendo si tus palabras serán aprobadas por los demás, y toda tu vida te vuelves títere de los deseos de otras personas.

Sobre todo, los padres son muy importantes en estas primeras etapas de tu vida. Recuerdo con tristeza el caso de un buen compañero de trabajo. Me platicó: “Mira Edgar, cuando yo era niño mi mamá me decía, si no estudias… ¡vas a acabar como mensajero! Y heme aquí… he sido mensajero por 10 años”.
Por otra parte, los padres de Alejandro Magno, cuando él tenía 15 años, le confesaron que ellos no eran sus verdaderos padres… sino que Zeus era su padre.

Para el joven Alejandro, esta mentira fue tan impactante… que acabó actuando como un auténtico hijo de Zeus, siendo uno de los más célebres conquistadores de la antigüedad.
Tanto si crees que puedes o no puedes… estás en lo correcto, diría una frase.
Por eso, padres, hagan creer a sus hijos que pueden llegar a elevadas alturas en la vida. No por controlarlos les digan cosas no positivas acerca de ellos mismos.

Y si tú como joven, sientes que fracasas mucho… el éxito es un fracaso de una cuantía mayor.
El fracaso se asusta y huye, ante la persistencia…
Bueno… a estas alturas ya habrás comprendido que tú por naturaleza deberías tener un sano concepto de ti misma… es más, ni siquiera el concepto debería estar en tu mente.

Deberías estar perdida viviendo, tanto, para no darle tiempo a tu mente para pensar en eso…
Los chamanes mexicanos decían, que para ellos no eran tan importante las palabras… que las acciones nuevas conllevan reflexiones nuevas.

A la acción… los fantasmas aterradores de los pensamientos se esfuman. Es como si de súbito, te hubieras dado cuenta que eres capaz de hacer gimnasia, aunque seas gordita… o de jugar basketball, aunque seas chaparrita…
En tales casos, tendrías que empezar a entrenar y a hacer ejercicios para tener elasticidad y ser hábil, verdad?
Lo mismo cuando se trata de volver a creer en ti. Es como cuando te dicen “ya no lo pienses mucho ¡hazlo!”. Lo primero en que tienes que concentrarte es en actuar. Actuar como tú lo sientas y tú quieras ser.
Hay mucha gente que utiliza el manejo del bajo concepto de muchas personas para otros fines. Recuerdo que cuando tenía 17 años, entré a un trabajo de esos de multinivel en los que se engaña a la gente. En que vas por un puesto de trabajo… y se te acaba convenciendo para que vendas cosméticos o productos de belleza ¡y pagando en vez de que te paguen!
Yo fui uno de los que cayó… y a la vez tenía que engañar a otras personas para que hicieran lo mismo.
Observaba como los principales de la empresa nos decían: “Imagínense, decenas de jovencitas con baja confianza en sí mismas… y ustedes diciéndoles que valen ¡no se imaginan como funciona eso!”.

Por supuesto, cuando me desperté y me di cuenta de lo que estaba haciendo, inmediatamente renuncié.
También, una exnovia me compartió una historia… sus padres –para variar- la llenaron de un pobre concepto de sí misma, siempre peleaban, y desde niña, encontraba refugio emocional en un amigo como de 35 años.

Era su confidente y, como ella me decía, era el papá que siempre hubiera querido tener…
Se convirtió en una bellísima y atractiva chica, y la amistad siguió igual.
Mi exnovia se peleó con sus padres, se salió de su casa, y le pidió permiso a su amigo para vivir con él, en lo que encontraba trabajo y podía rentar en otro lado.
El aceptó.

Después de unos días… ¡le dijo que quería tener relaciones sexuales con ella!
Se sorprendió. Toda la imagen que por años ella había tenido de él, se esfumó.
Me comentó también que, cuando él regresó de Oaxaca de un viaje, le platicó algo que le abrió los ojos:”En Oaxaca conocí a una jovencita de 15 años… y con problemas emocionales para variar ja ja !! solo la escuché… otra víctima más”.

Y me platicaba que la cara se le transfiguraba con malicia cuando le platicaba esto.
Mi exnovia finalmente me dijo: “Edgar, es como si alguien me quitara la venda de los ojos. El se aprovecha de las chicas desde que son jovencitas. Cuando tienen un bajo concepto de sí mismas, las escucha… se gana su confianza. El invierte muchos años en escucharlas… hasta que llega el momento en el que les pide su pago: relaciones sexuales”.

Padres ¿Ahora entienden lo que inyectar de baja valoración sobre todo a sus hijas puede causarles en peligros? Por favor, sean más fuertes e inteligentes para controlar a sus hijos sin bombardear su confianza interior. No sean flojos y cómodos. Piensen más…
Bien, el siguiente ejercicio de Rachel Charles, puede ayudarte para entrenar tu imaginación y sentirte protegida, en el intento por rehacer tu concepto de ti misma.

Es muy efectivo.
Busca un sitio en el que te sientas absolutamente seguro y nadie te interrumpa. Cierra los ojos y relájate por completo, sabiendo que estás a punto de aprender a brindarte protección psicológica.
Recuerda cualquier situación molesta en la que te hayas sentido invadido por energías hostiles. Visualízate allí y evoca a quienes te acompañaban. ¿Qué es lo que hicieron o dijeron? ¿Cómo te sentiste? ¿Cuáles fueron tus reacciones?
Ahora imagina que comienzas a andar para distanciarte de la situación, y llegas a una bonita casa antigua.
Has oído que pertenece a una persona anciana y sabia. La puerta está abierta y no hay nadie a la vista; así que decides explorar. Subes las escaleras hasta la planta superior, muy aireada y luminosa.

El sol brilla a través de la ventana e ilumina un viejo baúl. Lo abres y descubres que contiene algunas bellas prendas de vestir. Te intriga particularmente una chaqueta o camisa de seda; así que la coges. Admiras su fino material y te atrae su color. Te la pruebas y te asombra comprobar que te queda perfecta.
Este descubrimiento te entusiasma, porque te hace sentir que ha sido confeccionada para ti.

Ves un movimiento en un rincón del cuarto y te das cuenta de que la persona que vive en esa casa ha estado allí desde que llegaste. Te sonríe y dice: “Te he estado esperando. Tómala, es tuya. La seda te protegerá; así que úsala cuando sientas que la necesitas”.
Agradece el regalo a aquella sabia persona y continúa la conversación del modo que consideres oportuno.
Ahora te despides y abandonas la casa sin quitarte la prenda que te han regalado. Retornas a la situación difícil, pero esta vez sabes que la seda te protegerá.

Mientras la persona o personas hostiles se burlan de ti o te miran con desdén, compruebas que sus palabras y miradas no consiguen atravesar la seda, sino que simplemente rebotan sobre ella. Soportas su agresión con calma y dignidad porque sabes que no pueden hacerte daño. Su antagonismo disminuye de forma paulatina.
Permite que la situación se diluya poco a poco, y luego busca un sitio seguro donde guardar tu preciosa prenda de seda. Afirmarte que cuando te sientas amenazado te la pondrás, confiando en sus poderes protectores.

lunes, 7 de octubre de 2013

Cuando estas Enamorado


ESTAR ENAMORADO, Y AMAR, no son la misma cosa. Al estar enamorados, el cariño sale fácil, sin mayor esfuerzo, pero al terminar esta etapa, a los 3 años más o menos, es la voluntad de cada miembro de la pareja la que decide los abrazos, los besos, las miradas cómplices, los masajes mal intencionados con finales felices, o la ternura que no termina. En el momento que uno de los dos deja de dar cariño, ese amor se empieza a desmoronar. La pasión inicial se acaba, y el fuego se calma, pero cuando ambos construyen el amor día a día, se puede tener una relación que dure para siempre, porque ambos hacen de todo para ver feliz a su pareja, y a toda su familia.

miércoles, 2 de octubre de 2013

La Solidaridad

La verdadera solidaridad, aquella que está llamada a impulsar los verdaderos vientos de cambio que favorezcan el desarrollo de los individuos y las naciones, está fundada principalmente en la igualdad universal que une a todos los hombres. Esta igualdad es una derivación directa e innegable de la verdadera dignidad del ser humano, que pertenece a la realidad intrínseca de la persona, sin importar su raza, edad, sexo, credo, nacionalidad o partido. 

La solidaridad trasciende a todas las fronteras: políticas, religiosas, territoriales, culturales, etc. Para instalarse en el hombre, en cualquier ser humano, y hacer sentir en nuestro interior la conciencia de una “familia” al resto de la humanidad. 

La solidaridad implica afecto: la fidelidad del amigo, la comprensión del maltratado, el apoyo al perseguido, la apuesta por causas impopulares o perdidas, todo eso puede no constituir propiamente un deber de justicia, pero si es un deber de solidaridad. 

Un análisis del concepto del valor de la solidaridad nos ofrece los siguientes componentes esenciales: 

1º Compasión: porque la solidaridad es un sentimiento que determina u orienta el modo de ver y acercarse a la realidad humana y social, condiciona su perspectiva y horizonte. Supone ver las cosas y a los otros con los ojos del corazón, mirar de otra manera. Conlleva un sentimiento de fraternidad, de sentir la empatía por el dolor de los otros. 

2º Reconocimiento: no toda compasión genera solidaridad, sólo aquella que reconoce al otro en su dignidad de persona. La solidaridad así tiene rostro, la presencia del otro demanda una respuesta. 

3º Universalidad: “La desnudez del rostro”, la indefensión y la indigencia es toda la humanidad y simboliza la condición de pobreza de esfera intimista y privada. 



¿Qué entendemos por solidaridad? 

Su concepto ha experimentado un proceso de transformación que se refleja en todos sus ámbitos. Para algunos es la reivindicación de derechos fundamentales y para otros sólo una actitud de piedad centrada en la limosna y en la asistencia. 

La solidaridad siempre implica los siguientes puntos: 

· La solidaridad es una virtud contraria al individualismo y al egoísmo. 

· Se refleja en el servicio y busca el bien común. 

· Su finalidad es intentar o solucionar las carencias espirituales o materiales de los demás. 

· Requiere discernimiento y empatía –ponerse en el lugar del otro- 


¿Por qué solidaridad? 

Solidaridad, porque es lo justo, porque todos vivimos en una sociedad, porque todos necesitamos de todos, porque todos estamos juntos en este barco de la civilización; porque somos seres humanos, iguales en dignidad y derechos. 

martes, 1 de octubre de 2013

Cuando estamos buscando la pareja perfecta


Cuando Pat y yo nos casamos estaba tan enamorada que no me encontraba en mis cabales. Pat afirmó en algunas entrevistas que nos habíamos casado bien conscientes de los importantes ajustes que debíamos hacer y de las crisis financieras que íbamos a enfrentar, pero esa era su propia opinión.

En lo que a mí respecta, no era consciente de nada excepto de que era maravilloso y que la vida sin él sería terrible.

“Entiendo muy bien cómo María, la reina de Escocia, se debe haber sentido cuando dijo de James Bothwell, su tercer marido: ” Yo lo seguiría hasta el fin del mundo en enaguas”, pues eso mismo sentía yo por Pat…

Si lo hubiera sugerido, hubiera seguido a Pat hasta Timbuctu sin siquiera pestañear. Era mi vida. Para mí, era perfecto y eso fue el inicio de nuestros problemas porque cualquier persona ubicada en un pináculo solo puede ir en una dirección: hacia abajo “.

Shirley y Pat Boone lucharon con sus diferencias para crear un fuerte y duradero matrimonio, pero el principio de su verdadero éxito como pareja vino cuando cada uno reconoció esa verdad esencial: NADIE ES PERFECTO.

Sé nos ha criado con la idea del príncipe azul y la cenicienta, y encontramos muchos jóvenes que no han podido establecerse con una pareja, por esa búsqueda del hombre o la mujer perfecta. Vemos cómo hoy en día hay más divorcios, porque nos casamos pensando que todo iba a ser color de rosa, y a la primera prueba tiramos la toalla.

¿Cómo podemos pedir perfección?, si nosotros mismo NO somos perfectos.

Cuando comprendamos esta idea tan simple, encontraremos ese amor y tranquilidad en el ser amado.

Nada vence el amor a primera vista, excepto el amor con discernimiento.

Proverbios 4:7
La sabiduría es lo primero. ¡Adquiere sabiduría! Por sobre todas las cosas, adquiere discernimiento.